Ağustos 13, 2021

El inicio

ile admin

El inicio
Todo empezó el 31 de diciembre del 2017, día noche vieja, había que ponerse ropa interior de color rojo para recibir el año nuevo. No tenía nada y se me encendió la luz, mi mujer tenía braguitas rojas, yo siempre le regalo lencería, ya que me gusta mucho ver a las mujeres con medias, tangas, saltos de cama, etc. ..

Sin decirle nada tome una braguita roja y me la puse, me gusto la sensación, estaba empalmado y excitadísimo. Me puse mis pantalones y a cenar con la familia. Estar sentado en la mesa al lado de mis cuñadas con la braguita roja, me excitaba muchísimo y me pase la mitad de la noche empalmado. Que decir que cuando llegue a casa (tras quitarme la braguita, mi mujer lo ignoraba) hicimos el amor salvajemente.

Tanto me gusto, que el día 1 de enero del 2018, tras la ducha me puse un liguero rojo, con medias rojas, que tome prestado de mi esposa, me vestí y salimos a tomar el vermut. Me sentía como una golfa camuflada. Mi mujer con su vestidito corto, mostrando sus fabulosas torneadas piernas y yo con “mi secreto interior” y la polla a punto de reventar. Al llegar a casa, tras quitarme mis “tesoros”, volvimos a hacer salvajemente el amor, la folle como cuando éramos adolescente, tal fue el momento que me pregunto si había tomado algo. Lo que es el poder de la mente y la imaginación. Decidí que el día 2 de enero, me incorporaría al trabajo con mis tesoros puestos.

Y así fue, repetí modelito, liguero y medias rojas. El entrar en la oficina con mi secreto en el interior, saludando a compañeras y compañeros, fue brutal, tan excitado estaba que fui dos veces al baño a masturbarme, estaba cansado, pero más feliz de lo habitual, estaba gracioso y divertido. Fue entonces cuando decidí comprarme lencería para mí, solo la idea me ponía cardiaco. Y así fue como compre mis primeras medias de malla, braguitas.

El tiempo iba pasando, y yo todos los días con mi ropita interior, nadie sabía nada, pero me comentaban que estaba más alegre y se me veía más feliz. Me anime y compre unas botas negras, de las que me gustan a mí, por encima de la rodilla y 14 cm de fino tacón, también cogí un vestido y un sujetador para ponerme y dar sensación de tener dos hermosas tetas. Cuando me lo puse en casa (mi mujer e hijas no estaban) fue alucinante, me gustaba a mí mismo, me hice fotos y las puse en xhanster, web que visitaba asiduamente y en la que no estaba dado de alta.

El verme en la web, como una autentica putona y la respuesta que tubo, me gustó tanto que me anime a publicar más. Hasta ese momento solo me masturbaba viendo videos y fotos de los demás, de las magníficas mujeres que había, empecé a masturbarme viendo mi propias fotos, para después masturbarme viendo foto de otros hombres, transexuales y amigos que me hice en xhanster, me empezaba a excitar el pensar estar con ellos, en trio con mi mujer, en intercambio de parejas, o realizar strapon con una mujer y yo vestido con mi ropa femenina.

Bueno, que decir que mi colección de lencería ha ido aumentando (zapatos de tacón, otro vestido, más ropa interior…), mi relación con mi esposa ha mejorado notablemente, hacemos el amor todos los días y ella encantada, sin conocer mi pequeño secreto, y ella diciendo que si tomo algo, si supiera.

El próximo paso será comprarme útiles para hacer un enema y plugs anales (los vibradores de mi esposa son en principio grandes para mi pequeño ojete). Solo pensarlo me pongo a cien.

Pero ese será el tema para mi próxima historia.